Casos especiales de acentuación

Palabras agudas de origen vasco en "ai"
Las palabras agudas de origen vasco cuya última sílaba contiene el diptongo ai, que en la lengua vasca se pronuncian como agudas con escasas excepciones, como Zalacaín, en castellano se acentúan según nuestras reglas.
Induráin, Andoáin, Araquistáin, Erdozáin, Urzaiz, Urtáin, Arkaitz, Belascoáin, Alcáin, Iturgaiz, Gabaráin, Argail, Zubiarráin
Erdozáin: aguda, terminada en n, se acentúa.
Urzaiz: aguda terminada en z, no se acentúa.
Unidades de medida del Sistema Métrico
Se acentúan solo los múltiplos y submúltiplos del metro, por ser palabras esdrújulas. El resto de palabras que indican medida son llanas y no reciben tilde.
Centímetro, decámetro, milímetro, hectómetro, pero decagramo, hectolitro, miligramo, centilitro, mililitro, decilitro, kilogramo
Acentuación de las mayúsculas
Las letras mayúsculas deben llevar tilde cuando les corresponda, exactamente igual que las minúsculas y de ninguna manera constituyen una excepción a las reglas de acentuación que hemos visto. Es errónea la idea de que las mayúsculas pueden acentuarse o no a voluntad del que escribe.
Área, Órgano, Únicamente, Águila, Ávila, DISTRIBUCIÓN
La “h” entre vocales
La h colocada entre dos vocales no cuenta a efectos de la acentuación, no altera las reglas de colocación del acento ortográfico. Por tanto, cuando una de esas vocales deba ir acentuada, se colocará sobre ella el acento con arreglo a las normas ya vistas, como si no existiese la h.
rehúso, prohíben, búho, desahucio, tahúr, ahínco, ahumar, mohíno, retahíla, vahído, cohibir, rehízo, alcohol, buhardilla, vehículo, rehén
El adverbio “solo”
La palabra solo, tanto cuando es adverbio (solo estudio por la tarde) como cuando funciona como adjetivo o determinante (estudio mejor solo) y los pronombres demostrativos este, ese, aquel, con sus femeninos y plurales, sean pronombres o adjetivos, no deben llevar nunca tilde por ser palabras llanas acabadas en vocal o en –s; y en el caso de aquel, por ser palabra aguda terminada en consonante distinta de n o s, según las reglas generales de acentuación.
Antes de la reciente reforma de nuestra Ortografía (DRAE 2010) el uso de la tilde en el adverbio solo era siempre optativo; pero era obligatorio cuando podían producirse casos de ambigüedad o anfibología:
Estaré en casa sólo (únicamente) por la tarde / Estaré en casa solo (sin compañía) por la tarde.
Miguel estudia solo (sin compañía) los domingos / Miguel estudia sólo (ningún otro día) los domingos.
A partir de ahora “se podrá prescindir de la tilde en estas formas incluso en casos de ambigüedad”, según la literalidad de la Ortografía de la RAE.
Los pronombres demostrativos (este, ese, aquel)
La acentuación de los demostrativos este, ese, aquel antes de la reforma de la Ortografía española de 2010 era la siguiente: como adjetivos, nunca llevaban tilde. Como pronombres, era obligatorio colocar el acento ortográfico si el no llevarlo podía cambiar el sentido de la frase.
Contaron (los caminantes) aquellas aventuras interesantes. Contaron aquellas aventuras (y no otras) interesantes.
Buscaron aquellos tesoros. Aquellos (sujeto) buscaron tesoros.
A partir de ahora “se podrá prescindir de la tilde en estas formas incluso en casos de ambigüedad”, según la literalidad de la Ortografía de la RAE.
Las formas neutras de los demostrativos (esto, eso, aquello) no llevan nunca acento porque solo pueden ser pronombres, no pueden funcionar como adjetivos y, por tanto, no hay lugar para la confusión.
Nunca vi aquello con claridad
Esto es responsabilidad del Estado
Incorporemos esto a nuestra empresa
Eso no está bien
Esto no hay quien lo aguante
Creo que eso le interesa
Aquello no era normal
Aun y aún
Se escribe sin tilde cuando se utiliza con el significado de hasta, incluso (o siquiera, después de negación).
Aprobaron todos, aun los que no estudian nunca;
Puedes quejarte y aun negarte a venir, pero al final iremos;
Ni aun de lejos se parece a su hermano.
También se escribe sin tilde cuando la palabra aun tiene sentido concesivo, aun cuando, aun así, aun + gerundio.
Aun cuando no lo pidas, te lo darán;
Me esmeraré, pero aun así, él no quedará satisfecho;
Aun conociendo sus limitaciones, decidió intentarlo.
Se escribe con acento cuando equivale a todavía con significado temporal:
Aún (todavía) no han llegado tus padres?
Aún no ha terminado el trabajo
Aún la espero;
Y cuando tiene valor intensivo o ponderativo. Es aguda que termina en -n y hay que marcar el hiato.
Este modelo tiene aún más potencia;
Tiene una biblioteca de más de cinco mil volúmenes y aún se queja de tener pocos libros;
Ahora que he vuelto a ver la película, me parece aún más genial.
Aún (todavía) queda mucho camino.
Aún (todavía) no han terminado la carretera.
No aprobó, ni aun (siquiera) lo intentó.
Aun (incluso) allí tendremos que esperar.
Aún (todavía) tendremos que esperar.
Saldremos a pasear aun (incluso) sin su consentimiento.
La conjunción “o”
La conjunción “o” se escribirá siempre sin tilde, ni entre letras ni entre cifras y al margen de que en algún caso pueda haber alguna posible confusión con el cero.
3 o 4, 40 o 50
Se cambia por la “u” cuando la palabra que sigue a esta conjunción disyuntiva comienza también por el sonido [o]. Y si precede a una cifra que comienza por este sonido, también debe cambiarse.
Un día u otro acabará este trabajo.
Nos quedan siete u ocho días.
El salario mínimo se sitúa en unos 750 u 800 euros.
¿La excursión la integran septuagenarios u octogenarios?